«HAZLO TU MISMO» – LOS RIESGOS DE HACER REFORMAS POR CUENTA PROPIA

Compartir:

El «Me lo hago yo» , «HAZLO TU MISMO», es una practica que se conoce hoy en día como «DO IT YOURSELF» (DIY), una moda en la que «fabricar» en casa objetos cotidianos como ropa, mobiliario, bisutería o alimentación se ha convertido en práctica habitual. Son numerosos los blogs que hablan de este tema y nos dan ideas para tener nuevos «hobbies»

Y así llegamos al mundo de la reforma y la construcción. «HAZLO TU MISMO» también parece la panacea de un trabajo que puede hacer cualquiera y para el que parece que no debe de haber especialización. El primer objetivo de acometer una vivienda por cuenta propia es el ahorro economico. Según un estudio, anualmente el 2% de las viviendas españolas necesita un reforma, lo que supone que muchos se planteen no recurrir a comprar construcciones nuevas, sino a destinar parte de su presupuesto familiar a la reparación de sus viviendas.

diy 1

El dicho de «lo barato sale caro» a veces se convierte en realidad. Pero ¿como podemos llegar a diferenciar lo que podemos hacer nosotros sin un sobrecoste añadido? ¿qué debemos dejar a los profesionales? Tendremos siempre que diferenciar qué trabajos suponen pequeños arreglos o cuales se convierten en una reforma de grandes dimensiones que no podemos llegar a controlar y se dilata en tiempo y en dinero. Y ya no hablamos de reformas integrales, ya que la reforma de un baño o cambiar un suelo son opciones muy elegidas para el «HAZLO TU MISMO».

Aunque el coste inicial del profesional no llegue a convencernos, cómo ya hemos citado hay 2 factores que se nos pueden ir de las manos en la reforma. El tiempo y el dinero. El tiempo que dedicamos a la misma, que en muchos de los casos son ratos libres que convierten el trabajo en algo «eternamente inacabado». En cuanto al dinero, se han de tener en cuenta los llamados «costes ocultos», los que no preveemos. La compra de un material en un almacén, nos suele llevar a no preveer el tener que comprar herramientas que no tenemos para la realización de los trabajos. Todo esto nos puede llevar a que el proximo «DO IT YOURSELF» de nuestra vivienda se nos presente como una pesada losa sobre las espaldas. Que lo sencillo de convertir un palé de obra en una mesa de jardin nos puede llevar a tener que comprar lijadora, barniz, brochas, y otros elementos decorativos,…por no hablar de nuestro tiempo «gratis». Siempre queda en nuestra mano elegir si es buena opcion hacerlo o no hacerlo nosotros, pero con previsión de costes.

diy 3

La especializacion de los trabajos de construcción, la dirección de la obra, la organizacion de las subcontratas y el saber hacer («know how»), en definitiva la experiencia nos dice que una empresa constructora puede ayudarte a la resolver con mas agilidad y sin sobrecostes los trabajos que quieres acometer en tu vivienda.

Lo que está claro es que el DIY nos ayudará a valorar lo que cuesta hacer las cosas. La gran satisfacción de hacerlo uno mismo a veces es sustituible por contratar a alguien para que lo haga o comprarlo ya hecho. Y en el caso de las reformas ocurre lo mismo. Si estás dispuesto a invertir mucho tiempo en ir a controlar las obras cada día, elegir los materiales y saber gestionar los imprevistos, es tu decisión.

Fuentes:
http://blog.planreforma.com/las-falsas-creencias-sobre-el-diy-hazlo-tu-mismo-pales-para-la-terraza/
https://cincodias.elpais.com/cincodias/2017/06/16/midinero/1497618685_075395.html